El Sindicato de Trabajadores Judiciales de Corrientes, con motivo de la situación de conflicto públicamente conocida, suscitada con motivo de un reclamo de índole salarial, hace saber:
Que desde la asunción de actuales Miembros del Superior Tribunal de Justicia dicho órgano ha evidenciado una actitud hostil y de menoscabo de la tarea desempeñada por sus subordinados y, en forma particular, respecto del personal administrativo llegando recientemente a poner en peligro la vida institucional del Sindicato de Trabajadores Judiciales.-
Las medidas que han dispuesto, en pos de un supuesto orden o mejoramiento del Servicio de Justicia hablan por sí solas, bastando algunos ejemplos:
a) Instaurar del adicional por “presentismo”, que en la realidad constituye un castigo al uso de la mayoría de las licencias, siendo tales autoridades todas ellas abogados y no pudiendo ignorar que en el personal se encuentra disponible las 24 horas, habiéndose un tribunal anterior durante el 1974 pronunciado al respecto estableciendo que la “disponibilidad” debe entenderse como “efectiva prestación”.
b) Modificación del régimen de licencias, reduciendo el número de las mismas, en especial lo relativo a las compensatorias de ferias.
c) Eliminación de los cargos de personal administrativo por la jubilación debe proveer a los ascensos para las respectivas coberturas.
d) Postergación de la carrera judicial al existir personal de hasta quince años sin ascender. El aumento notable de licencias por stress laboral y problemas neurológicos demuestran lo errado de ésta política pero el Superior no parece darse cuenta.
En sintonía con esta política interna debe destacarse el permanente hostigamiento hacia el quehacer gremial, imponiendo normas que limitan dicha actividad, provocando perturbaciones en las relaciones con los superiores jerárquicos al imponerles la obligación bajo apercibimiento de sanción de comunicar la nómina de personal que adhiere a medidas de fuerzas. Asimismo, la decisión tomada de antemano de descontar los días de huelga, dictada ya en el 2005, deja ver claramente que este Alto Cuerpo se ha puesto, como quien dice “en guardia” preparando las represalias para los judiciales que decidieran reclamar, anticipándose a los conflictos que este mismo Tribunal preveía generar o alimentar.
Que por si esto fuera poco y, con referencia a la sanción del Acuerdo que pretende someter institucionalmente al Sindicato de Trabajadores Judiciales, en una clara extralimitación de sus atribuciones, el Alto Cuerpo termina de demostrar para dónde juega; decide optar por el cómodo y fácil recurso de reprimir el reclamo, para todos los sectores reconocidos como justos, antes que asumir la plenitud de sus facultades y potestades para exigir al Ejecutivo el cumplimiento del presupuesto judicial.
Esta decisión que resulta absolutamente inconstitucional e ilegal, bajo el pretexto de “transparentar” el ejercicio del derecho de huelga, apunta a la denegación de derecho de huelga, exhibiendo la misma política gremial que no por casualidad está aplicando el poder Ejecutivo provincial respecto de los sectores en conflicto
Este Superior Tribunal de Justicia ha provocado en forma deliberada la prolongación del conflicto, el que podía haber resuelto por vía de la atención del reclamo que desde todos los estamentos del poder Judicial es compartido demostrando su absoluta incapacidad política y personal de cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes vigentes, faltando así al juramento que prestaron al asumir los cargos que hoy inválidamente ostentan.
Nos encontramos entonces con una decisión que constituye una verdadera aberración y contraria al ejercicio de la Democracia, término que este Superior Tribunal pretende adecuar a su propia interpretación, pero no logrará su objetivo ya que en el Estado de Derecho todos debemos ocupar nuestro lugar y defender lo que a cada uno corresponde.
En este sentido el Sindicato de Trabajadores Judiciales es portador de valores éticos que nadie puede válidamente objetar, ya que es nuestra costumbre llamar las cosas por su nombre.
Y porque decimos las cosas como son: DENUNCIAMOS LA ARBITRARIEDAD Y ABUSO DE AUTORIDAD DEL SUPERIOR TRIBUNAL DE JUSTICIA, DENUNCIAMOS SU SUBORDINACION AL PODER EJECUTIVO EN CABEZA DEL GOBERNADOR ARTURO COLOMBI Y SU SERVIDOR SERGIO TRESSENS, PROCLAMAMOS LA JUSTICIA DE NUESTRO RECLAMO, LA LIBERTAD DEL EJERCICIO DE DERECHO DE HUELGA Y LA CONTINUIDAD DE NUESTRA LUCHA HASTA LOGRAR NUESTRAS REINVINDICACIONES EN MATERIA SALARIAL Y EN MATERIA INSTITUCIONAL.
ASIMISMO INSTAMOS A LOS DEMAS GREMIOS EN CONFLICTO, DOCENTES, MEDICOS, PERSONAL DEL REGISTRO CIVIL, TRABAJADORES DEL BANCO DE CORRIENTES, TODOS SOMETIDOS A LA MISMA POLITICA DE NEGACION DE DERECHOS Y DE REPRESIÓN DE RECLAMOS, A CONTINUAR SU LUCHA, PRESTANDO ATENCION A LA EXPERIENCIA PILOTO DE ESTE SUPERIOR TRIBUNAL QUE NO IMPARTE JUSTICIA SINO QUE HACE LA VENIA AL PODER EJECUTIVO, NIEGA DERECHOS FUNDAMENTALES Y REPRIME LOS SECTORES EN CONFLICTO.
NOS AGRAVIA COMO TRABAJADORES LA REPRESION QUE VIENE EN LUGAR DE LA JUSTICIA PERO ES MAYOR LA VERGÜENZA AJENA QUE CORRIENTES EXIBA A JUECES DEL SUPERIOR TRIBUNAL QUE NIEGA JUSTICIA.
Que desde la asunción de actuales Miembros del Superior Tribunal de Justicia dicho órgano ha evidenciado una actitud hostil y de menoscabo de la tarea desempeñada por sus subordinados y, en forma particular, respecto del personal administrativo llegando recientemente a poner en peligro la vida institucional del Sindicato de Trabajadores Judiciales.-
Las medidas que han dispuesto, en pos de un supuesto orden o mejoramiento del Servicio de Justicia hablan por sí solas, bastando algunos ejemplos:
a) Instaurar del adicional por “presentismo”, que en la realidad constituye un castigo al uso de la mayoría de las licencias, siendo tales autoridades todas ellas abogados y no pudiendo ignorar que en el personal se encuentra disponible las 24 horas, habiéndose un tribunal anterior durante el 1974 pronunciado al respecto estableciendo que la “disponibilidad” debe entenderse como “efectiva prestación”.
b) Modificación del régimen de licencias, reduciendo el número de las mismas, en especial lo relativo a las compensatorias de ferias.
c) Eliminación de los cargos de personal administrativo por la jubilación debe proveer a los ascensos para las respectivas coberturas.
d) Postergación de la carrera judicial al existir personal de hasta quince años sin ascender. El aumento notable de licencias por stress laboral y problemas neurológicos demuestran lo errado de ésta política pero el Superior no parece darse cuenta.
En sintonía con esta política interna debe destacarse el permanente hostigamiento hacia el quehacer gremial, imponiendo normas que limitan dicha actividad, provocando perturbaciones en las relaciones con los superiores jerárquicos al imponerles la obligación bajo apercibimiento de sanción de comunicar la nómina de personal que adhiere a medidas de fuerzas. Asimismo, la decisión tomada de antemano de descontar los días de huelga, dictada ya en el 2005, deja ver claramente que este Alto Cuerpo se ha puesto, como quien dice “en guardia” preparando las represalias para los judiciales que decidieran reclamar, anticipándose a los conflictos que este mismo Tribunal preveía generar o alimentar.
Que por si esto fuera poco y, con referencia a la sanción del Acuerdo que pretende someter institucionalmente al Sindicato de Trabajadores Judiciales, en una clara extralimitación de sus atribuciones, el Alto Cuerpo termina de demostrar para dónde juega; decide optar por el cómodo y fácil recurso de reprimir el reclamo, para todos los sectores reconocidos como justos, antes que asumir la plenitud de sus facultades y potestades para exigir al Ejecutivo el cumplimiento del presupuesto judicial.
Esta decisión que resulta absolutamente inconstitucional e ilegal, bajo el pretexto de “transparentar” el ejercicio del derecho de huelga, apunta a la denegación de derecho de huelga, exhibiendo la misma política gremial que no por casualidad está aplicando el poder Ejecutivo provincial respecto de los sectores en conflicto
Este Superior Tribunal de Justicia ha provocado en forma deliberada la prolongación del conflicto, el que podía haber resuelto por vía de la atención del reclamo que desde todos los estamentos del poder Judicial es compartido demostrando su absoluta incapacidad política y personal de cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes vigentes, faltando así al juramento que prestaron al asumir los cargos que hoy inválidamente ostentan.
Nos encontramos entonces con una decisión que constituye una verdadera aberración y contraria al ejercicio de la Democracia, término que este Superior Tribunal pretende adecuar a su propia interpretación, pero no logrará su objetivo ya que en el Estado de Derecho todos debemos ocupar nuestro lugar y defender lo que a cada uno corresponde.
En este sentido el Sindicato de Trabajadores Judiciales es portador de valores éticos que nadie puede válidamente objetar, ya que es nuestra costumbre llamar las cosas por su nombre.
Y porque decimos las cosas como son: DENUNCIAMOS LA ARBITRARIEDAD Y ABUSO DE AUTORIDAD DEL SUPERIOR TRIBUNAL DE JUSTICIA, DENUNCIAMOS SU SUBORDINACION AL PODER EJECUTIVO EN CABEZA DEL GOBERNADOR ARTURO COLOMBI Y SU SERVIDOR SERGIO TRESSENS, PROCLAMAMOS LA JUSTICIA DE NUESTRO RECLAMO, LA LIBERTAD DEL EJERCICIO DE DERECHO DE HUELGA Y LA CONTINUIDAD DE NUESTRA LUCHA HASTA LOGRAR NUESTRAS REINVINDICACIONES EN MATERIA SALARIAL Y EN MATERIA INSTITUCIONAL.
ASIMISMO INSTAMOS A LOS DEMAS GREMIOS EN CONFLICTO, DOCENTES, MEDICOS, PERSONAL DEL REGISTRO CIVIL, TRABAJADORES DEL BANCO DE CORRIENTES, TODOS SOMETIDOS A LA MISMA POLITICA DE NEGACION DE DERECHOS Y DE REPRESIÓN DE RECLAMOS, A CONTINUAR SU LUCHA, PRESTANDO ATENCION A LA EXPERIENCIA PILOTO DE ESTE SUPERIOR TRIBUNAL QUE NO IMPARTE JUSTICIA SINO QUE HACE LA VENIA AL PODER EJECUTIVO, NIEGA DERECHOS FUNDAMENTALES Y REPRIME LOS SECTORES EN CONFLICTO.
NOS AGRAVIA COMO TRABAJADORES LA REPRESION QUE VIENE EN LUGAR DE LA JUSTICIA PERO ES MAYOR LA VERGÜENZA AJENA QUE CORRIENTES EXIBA A JUECES DEL SUPERIOR TRIBUNAL QUE NIEGA JUSTICIA.
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