Nuevamente, los representantes de los trabajadores activos y pasivos de la Provincia de Corrientes venimos, Sr. Gobernador, a reiterarle nuestra disconformidad con respecto a la política salarial implementada por su gobierno, como así también nuestro rechazo a la forma en que se distribuyen los recursos que generamos entre todos los correntinos.
Los incrementos salariales otorgados en general al personal de la administración pública provincial y municipal por las autoridades competentes durante el corriente año, además de no guardar ninguna relación con los excedentes presupuestarios que se producen debido a los ingresos de recursos federales y que para este fin de año van a superar los 500 millones de pesos, han sido devorados por el persistente incremento en el costo de los bienes de primera necesidad, fundamentalmente en los alimentos, las indumentarias y los farmacéuticos.
Esta lamentable circunstancia se vé agravada por las recientes declaraciones de su Ministro de Hacienda, el contador Sergio Tressens, quien manifestara que en el proyecto de Presupuesto de la Provincia para el año que viene no están contemplados incremento salarial alguno para los trabajadores activos y pasivos de nuestra Provincia.
Mejor regalo para este fin de año no nos podía brindar este funcionario, que, al igual que usted y otros funcionarios de su gobierno, con los 6 mil o 7 mil pesos que ganan mensualmente, poco les importa las calamidades que padecen los trabajadores y sus familias que en su inmensa mayoría deben sobrevivir con salarios por debajo de la línea de la pobreza.
Para colmo de males, en declaraciones posteriores y tratando aparentemente de enmendarse, manifestó que las actualizaciones salariales deben ser discutidas con “los gremios” entre enero y marzo del año que viene.
¿Con que gremios, quisiéramos saber? Si nunca discutieron salarios con nadie; si nunca otorgaron siquiera una audiencia a las representaciones gremiales.
Quien pretende tomar el pelo a los trabajadores, burlarse de la gente con manifestaciones de esta naturaleza, no tiene derecho a quejarse si como repuesta después recibe un insulto.
Eso sí, dejó perfectamente sentado su postura (que es la del Gobierno, obviamente) que en el Presupuesto Provincial para el año que viene se “reforzarán las partidas presupuestarias” para la “obra pública” en alrededor de 50 millones de pesos y que se “generarán las condiciones para atraer capitales privados”, es decir se seguirá con el festival de subsidios como lo vienen haciendo.
Nada diferente a lo que viene ocurriendo en nuestra Provincia desde hace unos años, donde la prioridad del Gobierno pasa por asignar los fondos públicos para los “amigos” de la “obra pública” y de la “producción” antes que mejorar la situación de miles de familias que dependen de un salario público miserable e indigno o de la ayuda social.
En esta oportunidad, esta Marcha Multisectorial está encabezada por nuestros compañeros del Centro de Jubilados y Pensionados de Corrientes, quienes han tenido la valentía de oponerse terminantemente a una reforma del Régimen Previsional que –entre otras cosas- pretende eliminar el 82 % móvil establecido en el vigente
Tenga usted, Sr. Gobernador, la plena seguridad que los jubilados y pensionados de nuestra provincia contarán con el respaldo total y absoluto de las entidades sindicales y organizaciones sociales integrantes de la Multisectorial que hace suyo el reclamo y las denuncias presentadas por la conducción gremial de los mismos.
Y por último, reiteramos nuestra siempre vigente pretensión de que no se confundan, tanto usted como las autoridades ejecutivas y legislativas en función de gobierno.
Que nuestros representados se manifiesten civilizadamente y en paz, bajo ninguna circunstancia debe significar que estén conformes, satisfechos con la situación y circunstancias con las que debe convivir, fundamentalmente la que tiene que ver con sus salarios.
Que el pueblo correntino sea manso y tranquilo no quiere decir que puede cualquier alcornoque funcionario suyo tomarle el pelo, mentirles descaradamente, prometerles lo que se les ocurra, sin hacerse cargo de las consecuencias.
Que los legisladores pretendan desprenderse de sus obligaciones constitucionales, como la facultad de fijar el presupuesto de gastos de la Provincia (y entre ellos, las remuneraciones de los trabajadores públicos), son actitudes que –mas temprano que tarde- el servidor público les va a reclamar y tendrán que hacerse cargo también de las consecuencias.
Multisectorial, 28 de noviembre de 2.007
Los incrementos salariales otorgados en general al personal de la administración pública provincial y municipal por las autoridades competentes durante el corriente año, además de no guardar ninguna relación con los excedentes presupuestarios que se producen debido a los ingresos de recursos federales y que para este fin de año van a superar los 500 millones de pesos, han sido devorados por el persistente incremento en el costo de los bienes de primera necesidad, fundamentalmente en los alimentos, las indumentarias y los farmacéuticos.
Esta lamentable circunstancia se vé agravada por las recientes declaraciones de su Ministro de Hacienda, el contador Sergio Tressens, quien manifestara que en el proyecto de Presupuesto de la Provincia para el año que viene no están contemplados incremento salarial alguno para los trabajadores activos y pasivos de nuestra Provincia.
Mejor regalo para este fin de año no nos podía brindar este funcionario, que, al igual que usted y otros funcionarios de su gobierno, con los 6 mil o 7 mil pesos que ganan mensualmente, poco les importa las calamidades que padecen los trabajadores y sus familias que en su inmensa mayoría deben sobrevivir con salarios por debajo de la línea de la pobreza.
Para colmo de males, en declaraciones posteriores y tratando aparentemente de enmendarse, manifestó que las actualizaciones salariales deben ser discutidas con “los gremios” entre enero y marzo del año que viene.
¿Con que gremios, quisiéramos saber? Si nunca discutieron salarios con nadie; si nunca otorgaron siquiera una audiencia a las representaciones gremiales.
Quien pretende tomar el pelo a los trabajadores, burlarse de la gente con manifestaciones de esta naturaleza, no tiene derecho a quejarse si como repuesta después recibe un insulto.
Eso sí, dejó perfectamente sentado su postura (que es la del Gobierno, obviamente) que en el Presupuesto Provincial para el año que viene se “reforzarán las partidas presupuestarias” para la “obra pública” en alrededor de 50 millones de pesos y que se “generarán las condiciones para atraer capitales privados”, es decir se seguirá con el festival de subsidios como lo vienen haciendo.
Nada diferente a lo que viene ocurriendo en nuestra Provincia desde hace unos años, donde la prioridad del Gobierno pasa por asignar los fondos públicos para los “amigos” de la “obra pública” y de la “producción” antes que mejorar la situación de miles de familias que dependen de un salario público miserable e indigno o de la ayuda social.
En esta oportunidad, esta Marcha Multisectorial está encabezada por nuestros compañeros del Centro de Jubilados y Pensionados de Corrientes, quienes han tenido la valentía de oponerse terminantemente a una reforma del Régimen Previsional que –entre otras cosas- pretende eliminar el 82 % móvil establecido en el vigente
Tenga usted, Sr. Gobernador, la plena seguridad que los jubilados y pensionados de nuestra provincia contarán con el respaldo total y absoluto de las entidades sindicales y organizaciones sociales integrantes de la Multisectorial que hace suyo el reclamo y las denuncias presentadas por la conducción gremial de los mismos.
Y por último, reiteramos nuestra siempre vigente pretensión de que no se confundan, tanto usted como las autoridades ejecutivas y legislativas en función de gobierno.
Que nuestros representados se manifiesten civilizadamente y en paz, bajo ninguna circunstancia debe significar que estén conformes, satisfechos con la situación y circunstancias con las que debe convivir, fundamentalmente la que tiene que ver con sus salarios.
Que el pueblo correntino sea manso y tranquilo no quiere decir que puede cualquier alcornoque funcionario suyo tomarle el pelo, mentirles descaradamente, prometerles lo que se les ocurra, sin hacerse cargo de las consecuencias.
Que los legisladores pretendan desprenderse de sus obligaciones constitucionales, como la facultad de fijar el presupuesto de gastos de la Provincia (y entre ellos, las remuneraciones de los trabajadores públicos), son actitudes que –mas temprano que tarde- el servidor público les va a reclamar y tendrán que hacerse cargo también de las consecuencias.
Multisectorial, 28 de noviembre de 2.007
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